Biografía del Dr. Bach y su investigación en TERAPIA FLORAL

Edward Bach nació el 24 de septiembre de 1886 en Moseley (Brimingham) procedente de familia Galesa, origen importante para la creación de su legado,   murió en el año 1936 después de finalizar el propósito de su OBRA.

Edward era el mayor de 3 hermanos y ya desde muy pequeño destacaba  su  constitución débil y su gran sensibilidad e intuición. Era un niño que creció  en contacto con la naturaleza y las plantas, se pasaba horas observando las plantas y los animales.

En su adolescencia  sobre el año 1902 hasta 1906, trabajo  en la empresa familiar, dedicada a la  latonería, viéndose confrontado con la difícil situación de los trabajadores que enfermaban a menudo  debido a las malas condiciones en las que vivían y  solían trabajar. Estos, en  muchas ocasiones no podían recurrir a la medicina porque no tenían recursos económicos suficientes para poder ser tratados.

Edward, ya de pequeño tenía la capacidad de empatizar con todo su entorno y con las personas, así que toda esta etapa le sirvió para “ver” el dolor de las personas y poder entender su sufrimiento. Esta vivencia fue motivadora de su propósito que la  terapia que desarrollaría en los años venideros fuera un tratamiento al alcance de todos en todos los sentidos.

Impulsado por la experiencia vivida en la empresa familiar, en 1906 empezó sus estudios de Medicina graduándose en el año 1912.  Durante el siguiente año (1912-1913) estuvo haciendo prácticas en el  HOSPITAL DEL UNIVERSITY COLLAGE DE LONDRES. Finaliza sus estudios como cirujano formando parte del  REAL COLEGIO DE CIRUJANOS.

EN 1914 TOMA EL CARGO DE director del HOSPITAL DEL UNIVERSITY COLLAGE DE LONDRES, teniendo a su cargo 400 camas con heridos de guerra durante la 1ª. GUERRA MUNDIAL.

En 1915, además de su gestión en el Hospital, crea su propio consultorio. Durante todo este tiempo se empezó a dar cuenta que la relación enfermedad / tratamiento /paciente no era siempre igual. Relacionó que el mismo tratamiento en la misma enfermedad no solucionaba el problema de la misma manera en diferentes personas, se dio cuenta que era el PACIENTE y sus “CONDICIONES” internas y externas las que hacían que el éxito del tratamiento fuera posible.

En 1917 a Edward Bach le diagnostican un tumor intestinal con metástasis, dando por su vida solo 3 meses, pronóstico que no se cumplió en absoluto. Durante este tiempo estuvo investigando el remedio para su propia enfermedad además de investigar sobre la inmunología con el propósito de encontrar la bacteriología que causan las diferentes enfermedades. Todo este proceso lo realiza en el HOSPITAL DE UNIVERSITY COLLEGE como bacteriólogo.

EN 1918 descubre una vacuna contra la TOXEMIA INTESTINAL. Siendo publicado su estudio en revistas médicas del momento y en el “acta real de la sociedad de medicina” en el año 1920.

También y hasta el año 1922, empieza a trabajar en un hospital donde se trabaja con métodos Homeopáticos, allí conoció la doctrina Hahnemannpadre de la homeopatía clásica. Durante este tiempo confirma, ante la sorpresa  la teoría que la enfermedad crónica podría tener relación con la toxicidad intestinal, coincidiendo su visión con la de Hahnemann.

Durante todo este tiempo Bach cada vez se orienta más sobre los estados de ánimo de la persona así como buscar tratamientos basados en los principios de la homeopatía en las plantas, aportando también sus estudios sobre las bacterias  a las investigaciones homeopáticas. Investiga y prepara vacunas (que alguna de ellas aún se utilizan hoy día) utilizando 7 tipos de bacterias.

En 1920 es otro de tantos  momentos importante en la carrera de Bach ya que  conoce a Rudolf Steiner, quien le transmite la importante relación con las PLANTAS, EL CULTIVO, LA RECOLECCIÓN,  LA INFLUENCIA ASTROLOGICA Y SUS PROPIEDADES ESPIRITUALES

En 1928 sus viajes a Gales son frecuentes en búsqueda de relación con la naturaleza y desarrollando su conexión  e intuición con las plantas y la naturaleza.

En el año 1929  Comienza sus primeras experiencias con las flores utilizándolas con éxito en algunos tratamientos, un año después abandona su trabajo como médico en Londres para dedicarse exclusivamente a la búsqueda de los remedios.

A partir de este periodo ya no investiga más sobre vacunas ni toxemias intestinales, se dedica por completo a la búsqueda de sus remedios, siendo los primeros con los que investiga IMPATIENS, MIMULUS y CLEMATIS.

Un año más tarde en 1930 amplia la experiencia sanadora con AGRIMONY, CHICORY, VERVAIN, CERATO, CENTAURY y SCLERANTHUS.

EN 1931 escribe su primer libro “CÚRATE A TI MISMO” Además de ampliar con las esencia de WATER VIOLET y GENTIAN.

En 1932 escribe el libro “libérate a ti mismo” y empieza a dar de forma activa sus tratamientos en consulta. Además en este tiempo encuentra la esencia ROCK ROSE con la que completa las doce primeras esencias. Es aquí cuando escribe su libro “LOS 12 CURADORES” donde se detallan las 12 flores con las lecciones a superar.

En 1933 Va descubrir GORSE y OAK, después HEATHER y ROCK WATER dándoles el nombre de los 4 ayudantes. Durante este tiempo escribe el libre los 12 curadores t los 4 ayudantes.

Durante este tiempo Bach empieza a ofrecer sus tinturas madres a farmacéuticos para que sean distribuidas a un precio reducido para que todos pudieran llegar a este tratamiento.

Durante el año 1934 amplía los 4 curadores añadiendo las esencias florales VINE, OLIVE y WILD OAT, convirtiéndose en los 7 ayudantes.  Estos complementan a las esencia florales que apoyan a los aspectos astrológicos o de la personalidad,  estos últimos ayudan en la trascendencia a aspectos negativos de la vida, que incrementan nuestros aspectos personales  negativos.  Tenemos en cuenta que el Dr. E. Bach siempre probaba los remedios en el mismo e iba ampliando sus registros.

A partir de aquí sigue con sus descubrimientos con esencias Florales que como el dijo, ya no eran como las otras, estas actúan en diferentes planos a los antiguos, son más espirituales y ayudan al desarrollo  del alma, aunque cada uno de ellos se corresponden con uno de los primeros remedios descubiertos. Su descubrimiento fueron según Jordi Cañellas, confirmando y basándose en los estudios de Julian Barnard. Este orden seria Cherry Plum, Elm, Aspen, Chestnut Bud, Larch, Hornbeam, Willow, Beech, Crab Apple, Walnut, Holly, Star of Bethlehem, White Chestnut, Red Chestnut, Pine, Honeysuckle, Wild Rose, Mustard, Sweet Chestnut.

Año 1935,  debido a que en esos tiempos la medicina adquiere  a una tendencia más “cartesiana” basada en la materia pura, el colegio de médicos amenaza al Dr. Bach en causar baja de dicho colegio debido a que el propio Dr Bach rompe con los estereotipos de la medicina del momento, siguiendo en su práctica el  juramento Hipocrático.

En 1936 escribe su última versión de su libro “los 12 curadores y otros remedios”, Terminando con un manuscrito sobre el método de tratamiento y las prescripción de las flores llamado “las hierbas curativas”.

El 27 de NOVIEMBRE, después de comentar con sus colaboradores “mi misión en este mundo ya ha terminado”, indicio que el el Dr. Bach sabía que iba a dejar su cuerpo físico, murió en un plácido sueño.

Antes de su fallecimiento, Bach dejo una carta para todos aquellos que quisieran conocer su obra, nos dijo:

“Queridos amigos, seria maravilloso formar una pequeña fraternidad sin rango ni oficio, no muy grande y en nada inferior a la otra, que se dedicara a los siguientes principios.

1-Que nos ha sido revelado un sistema de curación que no se conocía en la historia de los hombres, ya que, con la simplicidad de los remedios florales podemos anunciar con seguridad, con absoluta seguridad, el poder de vencer a la enfermedad.

2- Que nunca criticaremos ni condenaremos los pensamientos, las opiniones ni las ideas de los otros, recordando siempre que todos los hombres son hijos de Dios, que cada uno de ellos lucha a su manera por encontrar la gloria de su Padre.

3- Que salimos, como caballeros antiguos, a destruir el dragón del miedo, sabiendo que quizá nunca digamos una palabra de desaliento, sino que podemos llevarles esperanza, y más que nada, certeza, a aquellos que sufren.

4-Que nunca nos conmoverán el aplauso o el éxito que podamos encontrar en nuestra misión, sabiendo que no somos más que mensajeros del Gran Poder.

5-Que cuanto mayor confianza ganemos de aquellos que nos rodean, proclamaremos que creemos ser los agentes divinos enviados a socorrerlos en su necesidad.

6-Que a medida que se mejoren, anunciaremos que las flores del campo que los están curando son el regalo de la naturaleza, es decir el regalo de Dios, y así los traeremos de vuelta a la creencia en el amor, la misericordia, y la tierna compasión, y al Poder Todopoderoso del Ser Superior.”

El mismo día Escribió varias cartas una a  Víctor Bullen:

“Querido Vic. Creo que has visto todas las fases de esta obra. Podemos agradecer éste último episodio del doctor Max Wolf. Es una prueba del valor de nuestra obra, cuando los agentes materiales se levantan para distorsionarla, porque la distorsión es un arma mucho mayor que el intento de destrucción.

La humanidad pidió el libre arbitrio y Dios se lo otorgó, por lo tanto el hombre siempre debe tener una opción. En cuanto un maestro da su obra al mundo debe surgir una versión distorsionada de la misma. Esto le ha sucedido tanto a los más humildes como nosotros, que hemos dedicado nuestro servicio al bien de nuestros semejantes, como al más elevado de todos, a la divinidad de Cristo.

La distorsión debe surgir para que las personas puedan elegir entre el oro y la escoria. Nuestra obra adhiere a la simplicidad y pureza de este método de curación y cuando sea necesaria una nueva edición de Los Doce Curadores, debemos ampliar la introducción, para destacar con firmeza la ausencia de efectos dañinos, la simplicidad y los milagrosos poderes curativos de los remedios, que se nos han mostrado a nosotros a través de una fuente que es mayor que nuestro entendimiento.

Ahora siento, querido hermano, que encuentres cada vez mas necesario entrar en un silencio temporal, tú tienes en tus manos toda la situación y puedes manejar todos los asuntos conectados con los pacientes o con la administración de esta obra de curación, sabiendo que a personas como nosotros, que desean la gloria del auto sacrificio, la gloria de ayudar a nuestros hermanos, una vez que nos ha sido dada una joya de tal magnitud, nada nos puede desviar de nuestro sendero de amor y obligación para exhibir su lustre, pureza y sencillez a las personas de todo el mundo.”

Última carta a su equipo de trabajo y a Max Wolf:

1º de noviembre de 1936.

“Queridas y encantadoras personas: 

Hay momentos como este en que espero una invitación a algo que no sé muy bien. 

Pero si todas las llamadas legaran en un instante, me gustaría ir con vosotros, vosotros tres, para llevar la magnífica obra que hemos iniciado. Una obra que puede escamotear al mal todos sus poderes, la obra que puede hacer libres a los hombres.

Esto, que he intentado escribir debería ser agregado a la nueva edición de Los doce curadores.”

Edward Bach escribió Los doce Curadores y otros Remedios. Expuso en términos de simple comprensión los 38 estados mentales anímicos-emocionales.

Decidió dirigirse al Dr. Max Wolf, miembro conspicuo de la masonería inglesa, quien lo enfrentó y del que temía una posible distorsión de la obra: 

“Querido hermano, es posible que la mayor lección de vida que podamos aprender es la libertad. Libertad en relación con las circunstancias, el ambiente, las otras personalidades y para muchos de nosotros, libertad en relación con nosotros mismos.

Enfermó gravemente desde octubre, a fines de 1936, y luego de una leve mejoría, murió el 27 de noviembre en su casa de Mount Vernon.

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